Fonoaudiología y locución: Descubre cómo trabajan juntas
La Fonoaudiología es una disciplina esencial para quienes trabajan con su voz, como es el caso de los locutores. Conoce más a continuación.
La Fonoaudiología comprende como objetos de estudio la prevención, diagnóstico y proceso terapéutico relacionado con la comunicación humana, protagonista de la interacción entre personas. De esta forma, abarca diferentes problemas relacionados con el proceso comunicativo en diferentes etapas de la vida.
Por otro lado, el campo de la Fonoaudiología entrega herramientas que son útiles para el trabajo vocal, pudiendo ser un elemento de apoyo importante e, incluso, fundamental, para otros profesionales que usan la voz como herramienta principal de trabajo. Entre ellos, cantantes, oradores y locutores, quienes necesitan cuidar su aparato vocal para lograr diferentes tonos y entonaciones.
¿Qué es la Locución?
La tarea de los locutores y locutoras es darle vida a un texto escrito, o transmitir un mensaje comunicándolo de forma masiva.
Los profesionales del área pueden desempeñarse en medios como radios, televisión o publicidad; también como presentadores, narradores deportivos o reporteros.
Así, en la Locución no se trata simplemente de “leer en voz alta” o “hablar fuerte y claro”, pues, para hacerlo de forma efectiva, es necesario cumplir con ciertas condiciones. Estas son las que permitirán tener una voz equilibrada en contextos preparados o improvisados.
El locutor o locutora debe lograr una comunicación efectiva del mensaje que emite, el que está pensado para un tipo de público específico. Esto determina la elección de la jerga a utilizar, el tono, frecuencia y velocidad con los que se comunica mediante la voz.
¿Cuál es la relación entre la Locución y la Fonoaudiología?
La voz es el elemento mediante el cual el locutor o locutora ejerce su trabajo, por lo que necesita de herramientas vocales que le permitan realizar una buena fonación y articulación sin dañar su aparato vocal. Al mismo tiempo, debe tener manejo de la voz para emitir un tono y una expresión específicos.
Para que esto sea posible, debe tener control de la respiración, la cual, tiene tipos, modos y coordinaciones que se hacen mediante la acción de músculos como el diafragma, dorsales, intercostales, pectorales y otros.
También depende de otros factores como la presión espiratoria y la permeabilidad nasal. La primera, se refiere al aire que pasa por la faringe durante la fonación y de la cual depende el volumen o la intensidad vocal. Mientras que, la permeabilidad nasal, alude a la entrada de aire pareja por los orificios nasales, lo que permite a las persona no agitarse.
Además, para la Locución, es determinante la postura y la semicontracción de los músculos o tonicidad, principalmente, del rostro y el cuello.
Para poder lograr un control de la voz, lo que está estrechamente relacionado con el manejo de la respiración, es que resulta atingente el trabajo del fonoaudiólogo. Este, tiene el conocimiento y el profesionalismo de poder evaluar y diagnosticar estos parámetros.
Estos profesionales también entregan herramientas y ejercicios, como los de dicción y respiración, que le permiten al locutor mejorar su técnica y cuidar su aparato vocal. De este modo, lo entrena para prevenir posibles complicaciones que le puedan impedir hacer su trabajo de forma óptima.
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